Los terrenos son cada vez más escasos en las zonas densamente pobladas. Además, existe un conflicto en cuanto a los diferentes usos del suelo para la preservación del ecosistema; la agricultura/silvicultura, la extracción de materias primas, las infraestructuras de tráfico, la vivienda o las actividades de ocio. En este contexto, el desarrollo de terrenos baldíos se convierte en una cuestión importante para el progreso sostenible de las sociedades. Esto plantea riesgos para los inversores en cuanto a la contaminación existente y los costes futuros relacionados con la posible contaminación del suelo. Arne, con su empresa de consultoría ecoconsultants, acompaña a los clientes en la evaluación del estado actual, la posible contaminación del suelo antes de la transferencia de la propiedad y el desarrollo de estrategias de limpieza. Para los clientes que operan en emplazamientos industriales y realizan actividades de IPPC (Prevención y Control Integrados de la Contaminación), Arne también proporciona informes de referencia de acuerdo con la Directiva de Emisiones Industriales de la UE y, si es necesario, también informes de cierre como preservación de las pruebas para dejar los emplazamientos sin contaminación.